¡Todos los días pueden ser fiesta, pues
cada uno puede ser un día santo si los vivimos todos para Jesús! Cada día puede
ser santo, sagrado, purificado y apartado para servir al Señor.
Algunos valoran un día más que otro, pero
nosotros debemos juzgar iguales todos los días. (Ro.14:5) ¡Todos los días son
del Señor, todos son días santos! ¡No sólo días festivos, sino días benditos!
¡Al Señor no debemos amarlo más los domingos que cualquier otro día de la
semana! ¡Todos los días debiéramos amar y adorar al Señor por igual!
Todos los días podemos celebrar la fiesta de
acción de gracias. ¡Debemos estar agradecidos y valorar cada momento de cada
día, alabando y dándole gracias al Señor continuamente por ello! ¡Todos los
días podemos celebrar Navidad! Si tenemos Navidad en nuestros pensamientos y en
el corazón, podemos vivir todos los días como Navidad! ¡Cada día debemos amarle
más y más, cada día debemos ser más cariñosos y cada día ser una mayor
bendición! Entonces cada día será Navidad, Acción de Gracias, cumpleaños y Año
Nuevo, ¡todo en uno!
"¡Cada día con Jesús es mejor que el día
de ayer! ¡Cada día con Jesús más y más le he de querer! Me guarda y me salva, y
ahora vivo para El. Cada día con Jesús es mejor que el día de ayer!"
No hay comentarios:
Publicar un comentario